Neuropsicología clínica
Son diversas las causas que pueden afectar el funcionamiento cerebral, entre las que destacan, en el caso de la población adulta, las enfermedades cardiovasculares, traumatismos craneoencefálicos, neoplasias, enfermedades infecciosas, enfermedades degenerativas y demencias.
El Neuropsicólogo diseña actividades personalizadas y adecuadas a la necesidad del paciente, encaminadas a la rehabilitación. En un programa de rehabilitación neuropsicológica se especifican las condiciones ambientales, ejercicios y tareas que promueven la reorganización funcional de las áreas cerebrales afectadas. Cuando se encuentra una deficiencia crónica o residual se utilizan técnicas que promueven la sustitución del sistema cerebral afectado por los sistemas intactos o menos afectados, además se puede recurrir a técnicas compensatorias.
La estimulación cognitiva, engloba todas aquellas actividades que se dirigen a mejorar el funcionamiento cognitivo (memoria, lenguaje, atención, concentración, razonamiento, abstacción, operaciones aritméticas y praxias) por medio de programas de estimulación. Es un programa individualizado que establece qué áreas son susceptibles de estimulación y de qué manera, esto nos ayuda a establecer las pautas de estimulación adecuadas en cada caso. Se trata de conseguir resultados optimos y trabajar aquellas áreas donde se pueda conseguir cierta mejora o mantenimiento, sin incidir en un error que suele ser común: estimular a cierto nivel capacidades que por la propia patología están deterioradas.
Ámbitos de actuación:
- Deterioro cognitivo asociado a la edad (leves problemas de memoria y olvidos cotidianos que conlleva el envejecimiento primario o sin enfermedad asociada).
- Enfermedades degenerativas como demencia tipo Alzheimer, Parkinson, demencia Vascular, Fronto-temporal, Lewy, Pick…
- Cuadros epilepticos.
- Daño cerebral adquirido (traumatismos craneoencefálicos, ictus o accidentes cerebrovasculares, infecciones, tumor cerebral,…).
- Enfermedades desmielinizantes (Esclerosis Múltiple,…).
- Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA).
- Efectos de sustancias tóxicas y drogas.
- Trastorno de Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH).
- Trastornos Generalizados del desarrollo (TDG).